dejártelos pegados por toda la habitación, me llamabas original, cuando intentaba tocar el piano con los pies a la vez que tocaba la guitarra al son de frank sinatra y su moon river. Me llamabas Pitufa, por que siempre iba de azul, me llamabas gnomo, por que no sabia estar quieta ni un segundo, me llamabas rara por que si parábamos por un minuto, empezaba a darte la vara con que me aburría mogollón, me llamabas caótica, por que sabia poner tus días de al revés.
Añoro nuestras tardes, querida amiga.