sábado, 4 de junio de 2011

Pensé que no se presentaria.

Siempre habíamos sido buenos amigos, él solía lanzarme indirectas e intentar flirtear un poco conmigo, pero la verdad, es que nunca me di cuenta. Hasta el día en que le vi por primera vez, antes de aquel día, solíamos hablar a través de redes sociales o Messenger. Sin saber como era, ni nada por el estilo, le entregué un trocito de mi confianza a él. Cuando le vi, estaba tensa, nerviosa y no se por que la verdad, si para mi él era solo un amigo, un buen amigo. Suele pasarme, por mucha confianza que tenga con una persona, si estoy tiempo sin verla o si le conozco por primera vez, me comen los nervios. Ese día, vino a mi casa, me dio un toque al móvil y baje, allí estaba, plantado en el portal de mi casa, con un paraguas negro, le invité a subir a casa, yo hacia como si nada, hablábamos, estábamos en el salón, entré a mi habitación para coger un cigarrillo, mientras él hablaba con una compañera de piso, cuando salía por el pasillo, ella me dijo, he hablado con él, le molas, y dice que siente muchas cosas por ti, por si fuese poco en ese momento los nervios, todo, me comió de golpe, termine de escucharle, mientras ella se iba a su habitación, yo entraba al salón, para salir al balcón, el estaba esperándome en el balcón, sentado en una de las sillas que hay. Me senté al lado de el, como si nada, al rato de estar hablando él empezó a acariciarme el cuello, me quise morir, le besé. Me decía: eres súper bonita, tal...y yo lo único que quería en ese momento es que se callase, no quería escucharle, y si hubiese sido por mi, ni si quiera empezar nuestra extraña historia. Vinieron unos amigos, y al rato el se fue, decía que no quería estar con tanta gente que ya hablaríamos, yo me encerré en mi habitación, y me puse a pensar todo lo que acababa de pasar, termine ilusionándome por él, sin darme cuenta, como una granidísima tonta. Los siguientes días hablábamos, como siempre, pero la cagué, quise ir demasiado deprisa, y el se asustó. Dejamos de hablarnos por un tiempo, y para colmo íbamos al mismo centro de estudios, siempre me lo encontraba en algún momento del día. Y era algo que me reventaba, deje pasar el tiempo. Hasta que un día me lo encontré en el bus, no paraba de mirar y le dije, ¿que por que? nuestra amistad se había ido al carajo por una tontería, que a mi me daba igual liarme con el, que yo lo que de verdad valoraba era nuestra pequeña amistad, no le dejé hablar, quería que me escuchase, me bajé en mi parada. Llegue a casa, se lo conté a mis compis de piso, ellas me dijeron, que pasase de él, y aun que lo intentase, no podía. Por la tarde, fui a la biblioteca a estudiar un ratillo, me lleve el portátil, estaba en lo mió, en mi rollito, y vi que me habló, me dijo: por que me has dicho eso en el bus, le dije por que sinceramente lo pensaba, me contestó: yo no puedo decírtelo por aquí, prefiero decírtelo a la cara, ¿puedes quedar esta noche?, yo no sabia que decirle...solo me salían excusas para evitar verle, me arrepentí de haberle dirigido la palabra. Volví a casa, le esperé, y no se presentó. Pensé, soy imbecil. Y como una tonta a media noche le escribí un mensaje, diciéndole ''hey, al final has venido? es que yo acabo de llegar...'' al día siguiente, vi que me había contestado: ''No, al final no pude, siento no haberte avisado’’. Volví a sentirme como una imbecil. Pasaron un par de días, me habló, me dijo de quedar…le dije que vale, y se presento, en el portal de mi casa como la ultima vez. Nos sentamos en las escaleras de mi casa, en unas que hay al principio en la entrada, yo no paraba de mirar a cualquier lugar que no fuese él,le dije: bueno, qué, piensas decirme por que…, me contesto: Soraya, me agobiates, en ese momento no sabia que hacer, y pasé de ti. No quería ir tan deprisa, quería algo que fuese surgiendo con el tiempo. Antes de que terminase de hablar, le interrumpí, le dije: Ya lo sé, Andrés, pero aquella tontería no tiene nada que ver, con lo que quería decirte, yo prefiero conservar nuestra amistad, aquella que teníamos antes de todo lo que pasamos. Él se limitó a callarse la boca, a acercarse cada vez más a mí, ha acariciarme, y me soltó: yo no puedo hacer como si nada, Soraya, bésame. Aparté la cara, no quería volver a caer, después de unos cuantos intentos suyos, volví a besarle, a sentirme imbecil, tonta, idiota. Al rato fuimos a fumarnos un piti a un parque que hay cerca de mi casa, alli estabamos ambos, sentados en un banco, cada uno en una esquina, bien alejados. Él se limitaba ha acercarse cada vez más, yo me repetia a mi misma, que no terminaba de creermelo, queria que se fuese, intentaba escarmentarlo, no paraba de hacerme cosquillas, yo directamente me apartaba, o cambiaba sus palabras tontas como: que bonita eres, siempre quise tenerte, etc..por temas de conversacion normales, como por ejemplo, ¿cómo te va el curso?, no me contestaba, seguia diciendome gilipolleces. Hubo un extraño silencio entre ambos, y me dijo: ¿No crees, qué ya somos mayorcitos, para ciertas cosas? privarnos de las memeces del paso de la adolescencia a la madurez, sería lo mejor. En aquel momento, no actué como debia, lo único que provoque fué calentarlo, con besitos tontos. Me levanté del banco, me encendí un piti, y me puse a dar vueltas como una pava alrededor del banco, mientras él se quedaba mirandome y me decia: Soraya, no evites lo evidente, desde la primera vez que nos conocimos, ando en deseos de inventar nuevas sensaciones. Pasaba de él, pensaba que ya le habia calentado lo suficiente para que cojiera y se marchase. Sin darme cuenta, se levantó, me cogió embrazos, e intentó tirarme al lago, queria conseguir que me asustase, mientras el se reia sin parar, y yo le gritaba ''cacho idiota'', la verdad es que fue el unico momento de la noche que aprecie, haciendonos reir mutuamente de bromillas inocentes, ese pequeño momento de risa, desinteresado de toda la noche. Ves! yo quería eso, conseguir, que el habriese los ojos, si debia de ocurrir algo entre nosotros, que hubiese algo mas, algo con mas fuste, no solo limitarse a besitos y cursiladas de esas, y si el queria experimentar nuevas sensaciones, podria a ver sido de muchas formas, yo buscaba pasarmelo bien, no ser tan serios, y solo ir a un tema exacto. Rozaban las once de la noche, yo ya tenia sueño, le dije: bueno, es hora de que yo almenos me vaya, que mañana hay que madrugar, él, me cogio la mano, e intento darme un beso, yo aparte la cara, y le dije que no era tan fácil, pero alfinal cedí y le di un beso de despedida. Subí a casa, una amiga, que me esperaba desde hace rato me dijo: ''tu que, cacho perra, ya me estas contando lo que ha pasado, que en ved de tardar diez minutos como me has dicho, alfinal ha sido hora y media!'', le dije: nada, ha sido bastante raro, me sente en el sofa, y segui diciendole: no sé lo que estoy haciendo, despues de todo lo que hemos pasado...sólo podria tener dos opciones : una, seguirle y dos, pararlo. Ella, contestó: yo de ti pasaria de él, es tonto, y encima feo!, además no te conviene para nada.Todas mis amigas pensaban lo mismo, y en que mala hora no les hice caso, seguí su rollo, me decidí por la primera opción. Pasaron un par de días, volvimos a vernos, entorno a las diez de la noche, en el portal de mi casa, cuando le vi, me abrazó, no me soltaba, dándome besos cada dos por tres, otra hora y media con el, dando vueltas por el parque hablando de todo un poco, haciendo tonterías, aguantando algunas de sus memeces, él se solía calentar con facilidad, yo pasaba, y le cambiaba los temas de conversación, al final todos los tíos son iguales, sólo piensan en echar un quiqui, pero yo no pensaba hacer tal cosa con él, no podía ofrecérselo, debía de haber mas confianza entre ambos, no podía decirle si tal, vamos a hacerlo, por que no, a mi no me funcionan las cosas de esa manera, yo debo tener confianza, y sentirme cómoda, pero yo no me sentía así con él, ni por asomo. Siempre que me sacaba el tema, me quedaba callada, le soltaba una pequeña sonrisa falsa, que pensase lo que quisiera. Había llegado el momento de despedirnos, yo en aquel momento me encontraba encima de un banco, paseando de esquina a esquina, y el de pie, al ras del banco, en el suelo, no paraba de mirarme fijamente, y le dije, bueno, Andrés, me voy, buenas noches. Baje del banco, y me dirigía a mi casa, me dijo: no te despides?, me volví, y le di un beso.Llegué a mi casa, menos mal que no había nadie a simple vista, para interrumpirme con preguntas molestas, yo sabia que no estaba haciendo lo correcto, que por que, si ya le había olvidado, empezaba otra vez a intentar algo con él. Dos de mis compañeras de piso, estaban en sus habitaciones correspondientes, estudiando, entré a la cocina, me comí lo primero que pille, un sándwich de atún y tomate, me fume un piti en el balcón, y me fui a dormir. Volvieron a pasar un par de días, hablamos, y me dijo, que si me iba a su casa a comer y tal, en menos de dos semanas iba a volverle a verle, era raro…tres días ya, que estábamos juntos. Yo le daba vueltas a la cabeza, diciéndome a mi misma, pero vamos a ver, si el tonto este quería ir lentamente, por que cojones cada dos por tres me dice de quedar. Aquel día, ambos salimos del instituto y nos encontramos en la parada del bus, a mis compis de clase, que solían coger el numero 4, les extraño verme allí, y que también parase en una parada que no era la mía,les dije, es que hoy como en casa de unas amigas, tal… bajé detrás de él. De camino a su casa, entramos a un chino, el para comprar papel de liar, yo para comprarme un lucky, subiendo por el ascensor de su casa, uno enfrente del otro, llenos de besos y caricias ocasionales, llegamos a su casa, y estaba su madre, no queria que yo la viese, entró las mochilas y las dejó en su habitación, subimos a la terraza, y nos quedamos en la puerta, dentro del edificio sin llegar a salir, sentados en las escaleras, él fumandose otro porro, como no!, para variar...y yo abstenta de la realidad, en mi mundo. Pasó poco tiempo, unos cinco minutillos, volvimos a su casa, su madre se habia ido, estabamos solos, con la limpiadora dando vueltas por la casa, entramos al salón, ambos nos sentamos en el sofá, me dijo: acercate a mi, y le contesté: acercate tú...ambos estabamos cada uno en una punta del sofá, alfinal cedí, y me acerque a él, le di un beso en la mejilla, me abrazó, vimos un rato la tele, por su comportamiento el iba con intenciones de otras cosas, pero yo pasaba del tema, no queria, y menos mal, que no tenia profilacticos, en aquel momento tuve un golpe de suerte =) ¿porque?, yo no queria ofrecerselo, y mucho menos en esa situación, no tenia ganas, queria pasar el dia con el, pero no de esa forma, se cabreó, pero al rato se le pasó, hizo de comer, comí macarrones con tomate, y exceso de magro, que la mayoria se quedó en el plato, por que yo y la carne nos llevamos lo justo y necesario, y el comio lentejas, y ternera, pasamos la tarde en su casa, de risas, besos, viendo la tele y tal...el reloj rozaba las seis y media, habiamos tenido un gran silencio, yo estaba aburrida, y el se limitaba a jugar con el movil, me puse el abrigo, entre a su habitacion a por mi mochila y le dije, me voy Andrés, y me dijo: vale...te acompaño a la puerta, me acompañó, me quedé contra la puerta, me abrazó fuertemente, me dió un par de besos, y me fui. Al bajar de su casa, coji el ascensor, tuve la torpeza de bajarme donde no debia, y acabe bajando por las escaleras, me encontre a una señora, cuando salia del ascensor, y ella me dijo: pero niña! que te has equivocado, y yo: ya señora, esto de ser nueva en el edificio, es lo que tiene, que hasta que no me aconstumbre, andaré desorientada. Ella me contestó: me llamo rosa, bienvenida!, mientras yo bajaba las escaleras y le contesté: encantada , yo Soraya. Al rato llegué a casa, me habia costado encontrar el camino de vuelta a mi casa, por que el vivia entre callejuelas, y yo me liaba, no habia nadie en casa, entre a mi habitación, me puse a estudiar un rato, y llegó una compi de piso, y también amiga, me preguntó: ¿que habeis hecho?, se lo conté. Estuve estudiando un rato, cene, me duche, y alrededor de las nueve me fui a dormir. Al dia siguiente se le conte a una amiga de clases, y por la tarde fuimos a la biblio, le vi conectado, y le hable, estaba aburrida, y le dije en plan broma: '' hola, que tal? que sepas, que me debes una jajaja'' pasó un buen rato, y vi que me habia escrito un privado que decia: ''Lo nuestro no tiene fuste Soraya, como entenderas no voy a hablarle a todo el mundo que me hable, por que siempre estoy conectado'', en aquel momento me entro algo de rabia, y le conteste: ''Vale, lo siento andrés'. Aquellas fueron las ultimas palabras que le dije, y ahora, como no, vuelve a pasar de mi. Lo peor de todo, es que habia vuelto a ilusionarme con él, aun que valorase mucho más nuestra amistad, y ahora nos vemos, por nuestro centro de estudios, y lo mas bonito que nos sale a ambos, es mirarnos con cara de asco. La verdad, me da muchisima rabia, que me pase esto, que solo le sirva para un par de dias, y luego que me tire como a un pañuelo usado. Supongo, que volveré a olvidarle, y espero que la proxima vez, no caiga en su tentanción, estoy me pasa por ser lerda.

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